Enclavada en la tranquilidad suburbana, esta casa ordinaria exhibe un tiburón de fibra de vidrio de 25 pies que parece atravesar su techo, una poderosa declaración contra la guerra y la censura concebida por Bill Heine y el escultor John Buckley en 1986. Los visitantes se sienten atraídos no solo por su apariencia peculiar, sino también por la provocadora historia de resiliencia y lucha por la libertad artística que representa.
Este peculiar punto de referencia despierta curiosidad y genera conversación. El Headington Shark inspira a todos a abrazar lo inusual. Más allá de su atractivo artístico, la casa del tiburón sirve como una puerta de entrada al vibrante tapiz cultural de Oxford. Desde sus comienzos no convencionales hasta su papel actual como una pieza apreciada del patrimonio local, este destino transforma una calle tranquila en una celebración de creatividad e individualidad.